Lo que identifica intelectualmente a un cristiano: el Credo

No se es cristiano de cualquier manera. Se es cristiano por lo que se cree y por lo que se hace. Por ejemplo, un cristiano no puede ser proaborto (ver mi video de este punto) ni tampoco sostener que todas las creencias son iguales, como suponer que el dios del Islam es el mismo nuestro tal como se plantea en esa religión. El cristianismo tiene dos lados interconectados entonces: el lado práctico de como se vive (hay que ser hijos de Dios, ver mi video sobre el tema) y en lo que se cree, el lado intelectual. Sin embargo, ¿qué identifica en términos de creencia a un cristiano? El Credo, que es donde se plasma la fe como conjunto de declaraciones con las cuales nos comprometemos (ver Fe en este blog).

1. El Credo y su importancia

Para identificarse como cristiano de alguna confesión en concreto es preciso identificarse con un grupo específico de creencias. Las básicas de los católicos están en el Credo en cualquiera de sus dos redacciones: el símbolo de los apóstoles (que algunos llaman Credo corto) y el Niceno constantinopolitano (que algunos llaman Credo largo). Los puede consultar en el número 184 del Catecismo de la Iglesia Católica. Si alguien le dice a usted que es católico, pídale que rece en voz alta y con convicción el Credo. Suena a lista de chequeo y lo es, solo que desde luego cada línea del Credo implica muchas más cosas, varias de las cuales no comparten otras confesiones religiosas. Hay creencias fundamentales de todo cristiano (Jesús es Dios, Jesús es Hijo de Dios, es verdadero hombre, nació de María Virgen, el Espíritu Santo es Dios, Jesús murió por nosotros y resucitó, por colocar algunos puntos comunes; la virginidad perpetua de María, la Iglesia como institución, el Papa o algunos sacramentos nos dividen).

Ahora, el seguimiento al Credo no es solo para identificar movimientos no católicos, sino también para identificar falsos movimientos católicos. Dada la importancia de la Iglesia católica, más de un falso católico quiere aparecer como católico (por ejemplo, ¿qué hace Biden llamándose católico?). Y antes de que empiecen con esa tontería de que no hay que juzgar a nadie, vean mi video sobre el tema en el canal de este blog («Eso de no juzgar»).

2. El texto en una de sus redacciones

Entonces. ¿En qué cree fundamentalmente quien se dice católico? Veamos el Símbolo de los Apóstoles. Otras confesiones tendrán su propio credo.

Creo en Dios,

Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo,
Nuestro Señor,

que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó de entre los muertos,
subió a los cielos
y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo,
la santa Iglesia católica,
la comunión de los santos,
el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne
y la vida eterna.
Amén.

Eso es lo que usted proclama en la Santa Misa en cada domingo, o cada vez que asiste a ella.

3. La negación del contenido del Credo

¿Y si un católico no se ajusta a esas creencias o a las que se siguen de ellas? Pues o no es católico o bien es un hereje. Que la palabra no le asuste, que las cosas hay que llamarlas por su nombre. Noten que existen las herejías laicas, aquellas por las que se acusa a quienes no se ajustan a lo políticamente correcto (y que conllevan a la cancelación)o a los dogmas laicos de los cuales se niega discusión (ver mi nota «El derecho a discrepar de posiciones generalmente aceptadas (o sea de los dogmas pero de origen laico)») . ¿Qué es una herejía hoy en día para un católico? (para la corrección política es herejía todo lo que discrepe de su derecho a enriquecerse a costa de los contribuyentes, así esa ideología sea profundamente discriminatoria contra los que dice defender).

«751 Se llama herejía la negación pertinaz, después de recibido el bautismo, de una verdad que ha de creerse con fe divina y católica, o la duda pertinaz sobre la misma. (…)»

Código de Derecho Canónico

Noten que no basta llamarse católico para serlo. Cualquier puede llamarse católico solo con fines de propaganda su propia ideología, como hace grupos como Católicas por el derecho a decidir, que no son católicas.

4. ¿Cómo se llegó al Credo?

La formulación del Credo respondió a la necesidad de iluminar a los fieles respecto a las verdades de la fe, las cuales desde el principio se han llevado a debate. Muchas discusiones de hoy no tienen nada de nuevo. ¿Fue Jesucristo verdadero hijo de Dios? Los adopcionistas lo negaban (decían que era «adoptado»). ¿Jesús fue verdadero hombre? Los docetas decían que Jesús solo era hombre en apariencia. Y la lista sigue. Para una historia del Credo ver esa palabra en la Enciclopedia Católica.

5. Las diferentes declaraciones en el Credo, en la redacción del Símbolo de los Apóstoles.

Veámoslas rápidamente.

5.1 Creo en Dios,

Creo en un ser personal, no en una fuerza o en algo superior indeterminado. Nuestro Dios no es uno cualquiera, no es una suerte de creencia universal común a muchas religiones. Es el Dios cristiano.
5.2 Padre Todopoderoso,

Es Padre. No es padre/madre como quisieran los seguidores de la Nueva Era o los animistas, aquellos que hablan de la «madre tierra», creencia pagana llegada desde los más remotos tiempos bajo cultos como el de Isis, hoy por ejemplo la ONU tiene un día dedicado a esa divinidad.
5.3 Creador del cielo y de la tierra.

Nuestro Dios es creador. No es un elemento más de la naturaleza o el universo, es el Creador.

«268 De todos los atributos divinos, sólo la omnipotencia de Dios es nombrada en el Símbolo: confesarla tiene un gran alcance para nuestra vida. Creemos que esa omnipotencia es universal, porque Dios, que ha creado todo (cf. Gn 1,1; Jn 1,3), rige todo y lo puede todo; es amorosa, porque Dios es nuestro Padre (cf. Mt 6,9); es misteriosa, porque sólo la fe puede descubrirla cuando «se manifiesta en la debilidad» (2 Co 12,9; cf. 1 Co 1,18).»

Catecismo de la Iglesia Católica


5.4 Creo en Jesucristo, su único Hijo,

Creemos en Jesús como hijo de Dios. No es solo el Mesías, es también el hijo de Dios.

«En Jesús, Dios recapitula así toda la historia de la salvación en favor de los hombres.»

Catecismo de la Iglesia Católica, Nro. 430


5.5 Nuestro Señor,

«446 En la traducción griega de los libros del Antiguo Testamento, el nombre inefable con el cual Dios se reveló a Moisés (cf. Ex 3, 14), YHWH, es traducido por Kyrios [«Señor»]. Señor se convierte desde entonces en el nombre más habitual para designar la divinidad misma del Dios de Israel. El Nuevo Testamento utiliza en este sentido fuerte el título «Señor» para el Padre, pero lo emplea también, y aquí está la novedad, para Jesús reconociéndolo como Dios (cf. 1 Co 2,8).»

Catecismo de la Iglesia Católica

Por lo mismo, si Jesús es Dios entonces María es madre de Dios, a menos que uno afirme de modo herético que la calidad divina solo llegó a Jesús luego del nacimiento.
5.6 que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,

Jesús es verdadero hombre pero concebido de modo especial. No creemos que es un cuento su nacimiento, o que tuvo padre humano.


5.7 nació de Santa María Virgen,

Creemos en el nacimiento Virginal luego de la concepción por obra del Espíritu Santo, en lo demás se gestó como cualquier ser humano. Por eso Navidad es una fiesta antiaborto, por cuanto Jesús fue Jesús desde el vientre materno, como todo ser humano.
5.8 padeció bajo el poder de Poncio Pilato

Creemos en un Jesús dentro de la historia, un ser humano que existió y quien, durante el dominio romano en Palestina, fue sometido a torturas y proceso bajo el procurador Poncio Pilato.

5.9 fue crucificado, muerto y sepultado,

Creemos que se dieron esos tres eventos: la crucifixión, la muerte y la sepultura.

5.10 descendió a los infiernos,

Creemos que Jesús realmente murió y fue a donde van todos los muertos.

«632 Las frecuentes afirmaciones del Nuevo Testamento según las cuales Jesús «resucitó de entre los muertos» (Hch 3, 15; Rm 8, 11; 1 Co 15, 20) presuponen que, antes de la resurrección, permaneció en la morada de los muertos (cf. Hb 13, 20). Es el primer sentido que dio la predicación apostólica al descenso de Jesús a los infiernos; Jesús conoció la muerte como todos los hombres y se reunió con ellos en la morada de los muertos. Pero ha descendido como Salvador proclamando la buena nueva a los espíritus que estaban allí detenidos (cf. 1 P 3,18-19).»

Catecismo de la Iglesia Católica


5.11 al tercer día resucitó de entre los muertos,

Creemos que realmente resucitó. La Resurrección fue real (por eso la expresión es «de entre los muertos», no fue la recuperación de una catalepsia ni nada por el estilo).

5.12 subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso.

Creemos, como nos lo cuenta la Biblia, que luego de resucitar subió a los cielos para ir al lado del Padre.

«659 «Con esto, el Señor Jesús, después de hablarles, fue elevado al Cielo y se sentó a la diestra de Dios» (Mc 16, 19). El Cuerpo de Cristo fue glorificado desde el instante de su Resurrección como lo prueban las propiedades nuevas y sobrenaturales, de las que desde entonces su cuerpo disfruta para siempre (cf. Lc 24, 31; Jn 20, 19. 26). Pero durante los cuarenta días en los que él come y bebe familiarmente con sus discípulos (cf. Hch 10, 41) y les instruye sobre el Reino (cf. Hch 1, 3), su gloria aún queda velada bajo los rasgos de una humanidad ordinaria (cf. Mc 16,12; Lc 24, 15; Jn 20, 14-15; 21, 4). La última aparición de Jesús termina con la entrada irreversible de su humanidad en la gloria divina simbolizada por la nube (cf. Hch 1, 9; cf. también Lc 9, 34-35; Ex 13, 22) y por el cielo (cf. Lc 24, 51) donde él se sienta para siempre a la derecha de Dios (cf. Mc 16, 19; Hch 2, 33; 7, 56; cf. también Sal 110, 1). «

Catecismo de la Iglesia Católica


5.13 Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creemos en lo que dice la Biblia, por ejemplo en el Apocalipsis, en donde se nos habla de un juicio donde concurrirán incluso los muertos (Apocalipsis 20:11-14). En la Biblia hay un juicio particular y uno general, precedido por la resurrección de los muertos (Hebreos 6:1-2).

5.14 Creo en el Espíritu Santo,

Creemos en la Santísima Trinidad. Ya se ha mencionado a Dios Padre y a Dios hijo, ahora declaramos creer en Dios Espíritu Santo.


5.15 la santa Iglesia católica,

Creemos en la Iglesia fundada por Jesús mismo y en la iglesia comunidad universal (el término iglesia viene de ekklesía en griego, es decir, asamblea). Por tanto, al caminar con ella, camino también bajo su guía.


5.16 la comunión de los santos,

La comunión de los santos es la declaración de fe sobre la unidad entre los que aún estamos en esta tierra y aquellos que ya partieron, todos con Cristo a la cabeza. Por ello creemos en la intercesión de los santos, quienes ya ven el rostro de Dios.


5.17 el perdón de los pecados,

Creemos en la misericordia de Dios y a ella nos sometemos mediante un sincero arrepentimiento, como camino a una conversión real y efectiva para ser verdaderos hijos de Dios.


5.18 la resurrección de la carne

Creemos en que hemos de resucitar. Note que el texto no dice «resurrección de los muertos» sino «de la carne», ya que no resucitaremos tal como somos en vida, esto es, con las limitaciones corporales propias de este estado.


5.19 y la vida eterna.

Creemos que nada acaba aquí. Que la muerte corporal es solo el paso para la siguiente etapa de nuestra vida.


5.20 Amén.

Creemos en lo que hemos proclamado y nos comprometemos con ello. Ese es el verdadero sentido de amén. Lea mi artículo sobre esta palabra.

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